lunes, 22 de marzo de 2010

Hablemos de música...


Luego de ser vapuleado por escribir algo serio, tendré que hacer caso al respetable y dedicarme a chonguear en mi blog, quiero dejar en claro que no soy un payaso cibernético, solo me gusta la sensación de que alguien lee esto para distraerse (y de paso reírse de mi y si se puede de sí mismo).

“Ya se ha muerto mi abuelo ay ay ay” ¿Qué buena canción verdad? A pesar de que muchos argumenten que la letra es limitada, pienso que con tres simples frases la hicieron linda. Es que, al menos para mí, lo más importante de la música es la melodía, el ritmo. La letra puede ser un buen complemento, pero no me vengan a decir que es lo más importante del asunto, en especial cuando hay canciones con frases totalmente incoherentes, palabras inexistentes, o rimas absurdas.

Nunca me han gustado las baladas, la música romántica es tan lenta que deprime, te quita energías, te duerme, pone el ambiente tenso y reflexivo. Radio Ritmo Romántica y Radio A (la radio del amor) estaban vetadas en mi dial con especial énfasis en el bendito programa “Entre la arena y la luna” que tuve la desgracia de escuchar en algunas combis, la empalagosa voz de la locutora me torturaba siempre dando sus consejos en pro del amor, consejos tan idiotas como “perdona la infidelidad, el amor lo puede todo y lo más importante es que estén juntos”, habría que ser medio lento para hacerle caso.

Tampoco me gusta el reggaeton aunque solo por una cuestión simplista, no entiendo las letras, y el ritmo es parecido casi siempre. Además de ser todo hecho en estudio, se podría decir “sonidos artificiales”, prefiero los instrumentos tradicionales, la quena, zampoña o charango causan expresiones orgásmicas en mi rostro al escucharlos.

Por alguna extraña razón no me gustan los “ritmos negros norteamericanos”, el blues, soul, hip hop, menos el gosspell (música religiosa), etc. Aunque el jazz sí lo tolero, e incluso con algunas fusiones me agrada tanto que lo disfruto. Esto no tiene nada de racista, lo que no me gusta específicamente es el timbre de voz, sus jergas, formas de hablar, y el ritmo meloso. Les encuentro un parecido con la salsa sensual, el género que menos me agrada debido a que todo es “sudor con sudor, tu piel en mi piel, mi cama en tu cama, revolcándonos juntos en una noche de placer, mientras tu esposo no acepta la relación prohibida y nos mira por la rendija de la puerta...” y etcétera de tonterías relativas a la pasión, podríamos llamarlas canciones porno que aluden a las trampas, cachudos, y calentones.

Por lógicas razones uno de mis programas menos preferidos de la radio es “Baladitas en su salsa”, ese programa me deja aturdido cuando salgo de las combis, en esos momentos prefiero escuchar a Marci el Marciano, la peor combinación para mi, música romántica y salsa sensual.

La cumbia es una explosión de alegría y color, por más que las letras no digan nada relevante o sean para cortarse las venas siempre harán que te muevas (insisto con mi teoría de que lo más importante es la música). Como todos los ritmos es una expresión cultural.

Según mucha gente la música clásica te relaja o te calma, a mi me pone tenso y más ansioso de lo que soy normalmente. No sé qué diablos me hicieron con esa música pero por más agradable que sea no puedo escuchar un disco completo.

Los karaokes son una tortura china para mí, no me divierto cuando veo cantar a la gente lanzando gallos y desafinando, mucho menos me divierte cantar o aturdir a los demás con mi espantosa voz. Entiendo que para otros puede ser muy entretenido y lo disfrutan, que sean felices en sus “boxes” con un micro y sus videos de bajo presupuesto, prefiero quedarme viendo el Show de los Sueños a participar de estas actividades “artísticas”.

La canción del verano ha sido el movido “Verano Azul”, aunque no sé quién diablos hizo eso, el ritmo es pegajoso y está obligado en todas las discotecas playeras, además de que el 50% de chicas lo ha puesto como título de sus álbumes en el facebook. Hay otra que aspira al trono de la temporada en cuanto a música, la letra es lo mejor que le encuentro “paraparapapapa parapapa… shibun” ¿alguien tiene idea de qué significa? El año pasado era tan fácil con la canción del grupo 5… o el “clavo que te clavo la sombrilla” de hace unos años.

Lo interesante es que en donde sea y como sea, la música cumple su cometido, y su cometido es hacerte sentir lo que tú quieras sentir, al final de cuentas es un tipo de arte ¿no?

lunes, 8 de marzo de 2010

¿Ranking de universidades peruanas?


Es raro, difícil de comprender, no por lo complejo de sus términos o lo gráficos estadísticos, sino por los resultados que obtuvo este “estudio”, esta “sesuda” investigación, esta concienzuda búsqueda de información y comparación de datos. Quizás hizo eso el investigador, no tengo por qué dudarlo.

Pero son los resultados obtenidos los que me preocupan, al parecer he desperdiciado cinco años de mi vida pagando una universidad con bajos niveles de calidad educativa, muéranse del infarto, al parecer la mayoría de universidades particulares de este país están por debajo del promedio cualitativo de las nacionales. Esto debería ser una buena noticia si en realidad se reflejara en el día a día, si la infraestructura y equipos con los que cuentan estos centros educativos financiados por el Estado fueran óptimos o si tan solo tuvieran clases seguidas durante un año sin huelgas u otros desmanes.

Luis Piscoya Hermoza hizo este “estudio piloto” como dice en el documento, apoyado por la UNESCO y la Asamblea Nacional de Rectores (ANR), lo cual debería darle cierta credibilidad, y basa su estudio en 7 criterios:

- Selectividad de acceso a la universidad
- Carga docente
- Producción de graduados y titulados
- Gravitación del postgrado sobre el currículum y la matrícula (sigo sin entenderlo)
- Calificaciones académicas de los docentes
- Producción académica
- Investigación

El puntaje más alto lo obtuvo la Universidad Nacional Mayor de San Marcos (51), con bastantes puntos más que la PUCP (45), y con muchos más puntos que la Cayetano (35), La Agraria de la Molina es la cuarta (26), pero noten la enorme diferencia de puntaje entre estas, tengan en cuenta que son 46 universidades las que entran al conteo, o sea entre la 20 y la 46 todas están por debajo de los 10 puntos lo cual es deprimente, de acuerdo a esto de medir por puntajes la calidad educativa, debería ser más o menos parejo y alto el puntaje de la mayoría para pensar que estamos relativamente bien en cuanto a la educación superior.

Las sorpresas comienzan con menciones como la Universidad Nacional del Altiplano por encima de la famosa UNI, o al final del ranking la Norbert Wiener por encima de la UPC, sabemos que en esta última estudian apretaditos y todo pero tampoco creo que deban estar tan al fondo de la tabla.

Sorprende también que universidades donde impera el desorden o construyen edificios sin autorización estén por delante de otras tan ordenadas y reconocidas como la Universidad de Piura. Me llama la atención que los criterios que dominan son los de “selectividad de acceso” e “investigación”. En el primer caso, es lógico pensar que las universidades nacionales tengan más postulantes ya que en nuestro país la mayoría de gente no tiene los recursos como para pagar una universidad particular, esto hace que la primera opción de muchos sean las instituciones estatales, a más postulantes menos ingresantes (aunque las vacantes sean numerosas), especialmente en San Marcos.

Tomar en cuenta acá el asunto de las academias “pre universitarias” un gasto absurdo solo para rendir un examen, muchos llevan años “preparándose” y cuando entran a la universidad no rinden. Estos exámenes están hechos específicamente para que las academias sigan existiendo, creo que no miden en realidad la capacidad de nadie, y menos aún sirven para saber si una persona es apta para seguir una carrera universitaria.

En el caso de “investigación”, se deberían tener en cuenta los temas en los que se especializa cada uno de estos centros de estudios, hay carreras que manejan temas más propensos a ser investigados, como la medicina o la biología (carreras que tienen la Cayetano y la San Marcos), en el caso de la Agraria, cada vez que hacen un nuevo cruce de plantas es un tema de investigación, lo cual es perfecto pero no es como la administración de empresas de donde los temas no son precisamente lo más fáciles de encontrar para investigar, esto no es justificación para no realizar investigaciones.

Son discutibles y polémicos los resultados, es cierto que se necesita una línea de base para saber en dónde y cómo estamos parados en cuanto a educación superior, pero supongo que deberían añadir otros criterios, quizás índice de empleabilidad, número de docentes con maestrías o doctorados, horas recibidas de cursos, metodologías, la misma infraestructura serviría ya que todavía hay universidades que son casas acondicionadas para dar clases.

Hay otras que aún no tienen certificadas todas sus sedes, existen escándalos de corrupción, exámenes mundialmente conocidos por su poca rigurosidad, algunas bautizadas como “el arca de Noé”, y también cunas de revolucionarios sin causa. Otras que ofrecen carreras demasiado comerciales o imposibles en el país (ingeniería aeronáutica cuando acá no producimos aviones), en varias puede valer tu apellido o tu billetera, en otras cuántos años pasaste en la “pre” o en la academia para ingresar, y en algunas de qué partido político eres (sí señores hay partidos que manejan universidades) o el grupo religioso al que perteneces.

El estudio, en vez de una luz de alerta al estado para mejorar la educación superior, parece ser un mensaje tranquilizador, transmite la idea de que las “nacionales” están bien, lo cual no creo que sea del todo cierto. Por otro lado, coloca a universidades donde campea la desorganización en puestos expectantes (no en todos los casos) pero algunas simplemente no deberían aparecer en rankings.

Por cierto, no soy el único que discute los argumentos de esta dichosa investigación.

Pueden ver el documento en esta dirección
http://www.scribd.com/doc/109513/Ranking-Universitario-en-el-Peru

Y acá la ínfima nota de la ANR acerca del documento.
http://www.anr.edu.pe/index.php?option=com_content&task=view&id=260&Itemid=193