viernes, 20 de julio de 2007

Crítica a los críticos




Se supone que gozamos de libertad de expresión, pero también de opinión, este es el único derecho que no puede ser reprimido ni violado por nadie; es muy difícil que alguien controle lo que piensas, puedes gritar que no te gusta RBD y te podrán creer, pero por dentro solo tú sabrás que te desvelas con sus canciones o con los personajes (sobre todo si usan esas microfaldas). Influyen en nosotros una serie de estereotipos, prejuicios y construcciones sociales impuestas por la cultura dominante, en otras palabras “gringolandia” nos mete por donde puede sus estilos de vida; uno de sus mecanismos es la masiva producción cinematográfica de “Hollywood” llegando al punto de ya no saber a qué muerto resucitar, a qué nuevo héroe inventar, o a qué lugar del mundo destrozar.
A pesar de los terribles guiones, las aburridas escenas, lo predecible de las historias, las abominables actuaciones y la pobre utilización de recursos estéticos apropiados, no podemos negar que estas cintas “basura” nos emocionan, nos mueven el piso, proyectan una realidad ideal que quisiéramos vivir ¡Nos muestran a las mujeres que quisiéramos en nuestro cuarto el día entero! Causan sobresaltos, a veces nauseas, pero algo causan; esa es la misión del arte, estimularnos emocionalmente a través de lo que perciben nuestros sentidos, poco importa que Norteamérica quiera dominarnos mediante el TLC o cualquier otro pretexto Chavista si la primera vez (y la segunda o tercera) que vimos “Día de la Independencia” hubiéramos dado un brazo por apoyarlos en su lucha contra los malditos alienígenas que destruyeron la casa blanca y asesinaron a la esposa del presidente ¿No fue triste cuando la niña quedó huérfana de madre?
Ahora pues, también es triste cuando abres el periódico y encuentras el agrio comentario de un tipo autodenominado “crítico de cine” vapuleando la película que te hizo lagrimear ayer, no contento con eso te hace sentir peor al darte cuenta de que entiendes menos de la mitad de las palabras que utiliza, como separándose de los simples mortales que manejan el lenguaje coloquial ¿qué seriedad esperas de personas que califican películas con estrellitas? A veces usan puntitos, el mejor filme en la historia puede alcanzar 5 de estos valiosos galardones, el peor tendrá que conformarse con la dicha de ser mencionado por alguno de estos sabios audiovisuales.
No se trata de calificar producciones o hacer gala de conocimientos acumulados por años (algo sabrán) pues qué autoridad te da saber sobre algo tan subjetivo como el arte, no me explico cómo alguien puede elevar tanto su ego por el simple hecho de pasar su vida viendo películas y añorando las buenas épocas del cine, se trata de educar al espectador en un lenguaje comprensible para que pueda formar un criterio propio y decidir al final qué ver, mas no decidir con qué emocionarse, eso no lo decide nada ni nadie, somos tan libres con nuestra sensibilidad como con nuestra opinión, por eso se encuentran estrechamente ligadas. Quizás puedas tomar en cuenta sus opiniones, pero no necesariamente compartirlas, eso no te va a hacer menos listo ni preparado… disfruta tu visita a las salas de cine, reniega si no te gustó, apláudela si te encantó, solo acuérdate de una cosa, solo una, es ficción.

4 comentarios:

Germán Terán dijo...

El arte por el arte! Buen mensaje. Concuerdo contigo, el ser crítico no te da la autoridad de darle una categoría de bueno o malo a algo, eso queda al espectador, ese que nos lee, ese que mira nuestro trabajo.

Muerte a Tamayo.

Anónimo dijo...

Partes de supuestos que no me terminan de convencer. ¿Cómo así es que nuestra libertad de pensamiento es absoluta e inalienable? Es decir, cómo puede una cultura dominante imponerse subjetivamente a un yo autónomo absolutamente libre (en su subjetividad, queda claro): me parecen que son dos cosas que se contradicen.

Por lo demás, me parece que --haciendo de abogado del diablo-- la crítica en muchos casos apunta a la emoción fácil, a las asociaciones simples de imágenes e ideas, no tanto a qué nos debe o no emocionar. Las películas de Hollywood son para las masas y en la masificación se anula la individualidad. La interpretación es "objetiva", en tanto que colectivamente aceptada, pues a eso apunta. Lo contrario es imaginar películas como Nostalgia de Tarkovski que no se agotan en el lenguage objetivo sino que apuntan a despertar emociones más propias de cada expectador.

No obstante, estoy absolutamente de acuerdo en tu crítica a la calificación con estrellitas, al lenguaje de los críticos y, sobre todo, a la supuesta autoridad quasi divina con la que hablan.

Anónimo dijo...

no de nuestra libertad de pensamiento no es un supuesto... la estas ejerciendo, asi la cultura dominante quiera imponer parámetros y estereotipos no va a poder manipular totalmente tu cabeza. Ahora con lo de interpretación "objetiva" puede haber un acuerdo común pero eso no quita la posibilidad de discrepar.

Anónimo dijo...

¿Críticos de cine?. Tonterías.
Siempre he pensado que el crítico de cine, es un actor que nunca consiguió aquel papel, y solo le queda criticar la obra, que de reojo vió.
Citando a E. Sábato, en El Túnel: "Los críticos; Es una plaga que nunca pude entender. Si yo fuera un gran cirujano y un señor que jamas ha manejado un bisturí, ni es médico ni ha entablillado la pata de un gato, viniera a explicarme los errores de mi operación, ¿qué se pensaría?. Lo mismo pasa con la pintura. Lo singular es que la gente no advierte que es lo mismo y aunque se ria de las pretensiones del crítico de cirugía, escucha con un increible respeto a esos charlatanes. Se podría escuchar con cierto respeto a los juicios de un crítico que alguna vez haya pintado, aunque mas no fuera que telas mediocres."
Aunque odie citar gente, este pensamiento es uno de los mas acertados que he leido sobre la crítica y sobre los críticos...
El arte (en cualquiera de sus formas), es relativo, y si a alguien le gustó, no puede ser demasiado malo..., la crítica pública (que valoriza a una película en un diario, por ejemplo) es una falta de respeto y un atrevimiento, además de crearle a las masas un pre-concepto de la pelicula que fuí a ver sola.
(Y en la cual las lagrimas fueron anónimas)
En fin, igual criticaré: RBD es basura :).
Saludos.